jueves, 17 de junio de 2010

Ahí están ellos

Días como hoy, son esos días, en los que prefieres no levantarte. Después de trabajar, hacer la compra y todo eso, llegas a casa y piensas, ¿es esta mi vida? Y te entra rabia cuando te das cuenta de que la respuesta es sí. No te queda otra que aguantarte con lo que tienes y aunque no estés contento, tienes que agradecer lo que posees, porque en el fondo sabes que hay gente que tiene mucho menos y aun lo pasa peor que tu, con problemas realmente graves por asi decirlo, en fin…

Y aun sin saber que haré con mi vida, si la cosa mejorara o se quedara estancada, en la rutina, como siempre he dicho que odio, eso de que todo los días sea lo mismo, como si estuviéramos programados, eso me desquicia, me hace sentir una presión en el pecho y una angustia que, supongo que todo el mundo siente cuando algo no le gusta.

Bueno, después de todas esas cosas negativas que todo el mundo siente en algún momento de su vida, quiero contaros que alegra mis dias, esos en los que hubiera preferido no levantarme… Ahí están ellos, esas miradas, esas voces, esas almas, que sabes que siempre están ahí. Aunque en el momento que más triste estés no tengas ni ganas de hablar, pero sientes que no estas solo, que por muchos de esos días malos, ellos siempre van a estar ahí contigo, intentando sacarte una sonrisa, una expresión agradable en tu rostro, algo positivo.

Ellos son esas personas, que todo el mundo tiene en su vida y aunque algunas veces parecen invisibles, están contigo. Me refiero a tu familia, tus amigos, tu pareja y en definitiva a tu gente.

Hay personas que tienen solo una y otras tienen a muchas a su lado. Yo ahora mismo tengo a mucha gente lejos, a los cual echo de menos a diario, pero aquí cerquita solo tengo a una persona y es la que me hace sonreír todos los días por muy negros que se vean cuando sale el sol.


Hasta pronto.

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